Relato de la Batalla entre Romanos Patricios y Griegos de la magna Grecia
A la Grecia levantisca,
donde braman ¡Rebelión!
envió sus legiones Roma
al mando de Estilicón.
Hunos, godos y romanos
marchaban al mismo son
¡Aplastemos la revuelta!
¡A la cruz con el traidor!
Atenienses, conjurados
desafiaron al invasor
mas eligieron mal terreno
¡Esa fue su perdición!
Vallas, setos, pedregales,
huertos campos de labor
cercenaron sus falanges,
enfriando así su ardor.
Funcionó el ardid del suevo
que al combate se aprestó
y mientras contuvo un ala
el Hades la otra engulló.
Los pobres griegos, aislados
ninguna salvación tuvieron,
siendo en número superados
uno a uno perecieron.
Los ojos del estratego heleno,
amargas lágrimas vertieron.
Sus vitales refuerzos, atrapados,
prestar ningún auxilio pudieron.
Viendo la batalla perdida,
de su lino se despojó
y pidiendo perdón a Zeus
el puñal en su vientre hundió.
Y así acaba esta tragedia
con más sangre y sudor que gloria
de la hecatombe final de Grecia
y la victoria inmortal de Roma.
Epílogo:
En el Cielo y en el Jannah,
el Olimpo y el Valhalla
los dioses de la guerra, juntos
todos vieron la batalla
Ares y Atenea, abrumados
cayeron en la desazón;
Mientras Marte sacó pecho:
"Trece-cinco ¡palizón!"
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